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Apariciones y presencias en la Casa Cervantes de Vélez-Málaga


Durante muchos años, en Vélez-Málaga, se ha hablado mucho acerca de sucesos que ocurrían en uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad, la llamada Casa Cervantes.   En el año 1985, este edificio sufrió algunas alteraciones, modificándose su patio y reforzando los cimientos de su antiguo pozo. Unas obras que, según los relatos de sus protagonistas, desencadenaron toda una serie de sucesos paranormales. Varios testigos afirmaban que llegaron a oír pasos en estancias vacías, muebles que se desplazan por sí mismos, puertas que se abren y se cierran solas, golpes fuertes o ectoplasmas con siluetas humanas. Manifestaciones que han podido presenciar muchos testigos y que parecen asociadas a un pozo que existe en el patio de la residencia. Junto a él han detectado la aparición de un espectro que se pasea delante de todos y que, después de vagar sin rumbo concreto, desaparece. 

Varias personas que han trabajado en el edificio han afirmado de manera contundente haber visto a un extraño personaje con ropas de otra época y con la cabeza cubierta con un sombrero. Es el conocido como 'Hombre sin rostro'.

Otro testigo ha afirmado a Diario de Vélez que "cuando estuve allí dando la teórica de empedrador para las calles, una mañana se cayó la pizarra al suelo y se cerró la puerta del baño de un portazo".

Actualmente el edificio alberga distintas oficinas municipales, lo que hace que el famoso patio esté casi siempre transitado, circunstancia que ha permitido que las experiencias de estas apariciones hayan sido compartidas por grupos de personas , que no podían dar crédito a lo que estaba sucediendo ante sus ojos. Según cuentan, en 1994 un grupo de trabajadores de una empresa de limpieza se encerró en la Casa Cervantes para presionar sobre sus reivindicaciones. La huelga terminó de forma contundente, ante el terror que la aparición produjo entre los trabajadores. Todos los que han tenido ocasión de ver al presunto fantasma coinciden en afirmar que no tiene rostro. Los vecinos próximos al inmueble siguen en la actualidad escuchando a altas horas de la noche extraños sonidos que, a pesar de haber sido investigados, no han podido explicarse todavía. Algunos investigadores han llegado a la conclusión de que la figura del fantasma pertenece a un individuo que vivió en el siglo XIX y que al ir a sacar agua del pozo calló en el de tal forma, que su rostro se desfiguró de forma espantosa, debido a los fuertes traumatismos y al efecto de hinchazón producidos por el agua, durante el tiempo que permaneció en el pozo, hasta que fue rescatado su cadáver. 

Fuente: culturaandalucia.com


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